Para entender el origen de la bandera española hay que remontarse a la época de los Reyes Católicos. Efectivamente, no siempre fue roja y gualda. Con la unión de la Corona de Castilla, la Corona de Aragón y el Reino de Navarra, a partir de 1492 y hasta 1506 se utilizó el estandarte de los Reyes Católicos y así unificaron las diferentes banderas que se usaban.
Más tarde, Juana I de Castilla se casó con el Archiduque de Austria Felipe «el Hermoso» y las banderas españolas comenzaron a ser blancas y a incluir como elemento común la Cruz de Borgoña.
Con la llegada de Felipe V y la dinastía de los Borbones al trono español, se instaura una bandera de fondo blanco con el escudo de armas.
El problema de la bandera en blanco era el del reconocimiento en el mar. Por entonces las banderas de media Europa eran muy parecidas, tales como la de Francia, Portugal y otros reinos con los Borbones como monarcas. Incluso los buques ingleses, cuando utilizaban la bandera blanca con la cruz de San Jorge, podían ser confundidos con buques de otras nacionalidades. La historia nuestra bandera actual surge por una necesidad marítima.
En alta mar, al no poder identificarse con claridad, se producían situaciones embarazosas, desde equivocaciones y ataques entre barcos aliados, a no poder intervenir hasta estar casi seguros de si estaban realmente ante un enemigo. Para evitar estos incidentes, hace más de 230 años, Carlos III decidió dar color a la bandera para identificar a la Marina española.
Como en esta época España dominaba vastísimos territorios en ultramar, Carlos III decidió darle visibilidad e impulsó un concurso de diseño para dotarla de colores vivos que hicieran que sus barcos fueran fácilmente identificables.
Por encargo del Monarca, su ministro de Marina, Antonio Valdés y Fernández Bazán, convocó el concurso y eligió los doce mejores bocetos para que el Rey tomase la decisión final. Carlos III eligió dos de ellos, declarándolos reglamentarios el primero para la Marina de Guerra y el segundo para la Mercante.
Así, por el Real Decreto de 28 de mayo de 1785, se hizo oficial el cambio de bandera y empezó a usarse desde 1785 en los buques de la Armada para identificar a los barcos españoles que navegaban en alta mar.
¿Cuándo se hace popular la bandera?
El apoyo popular hacia la bandera se hizo latente tras las batallas contra los franceses a principios del siglo XIX. Esto empujó a Isabel II a convertirla en la bandera de España en 1843. Lo que comenzó como una bandera naval, acabó extendiéndose a otros ámbitos: puertos, aduanas…
Pero no es hasta el siglo XX, concretamente en 1908, cuando el gobierno decreta que la bandera española tiene que ondear obligatoriamente en los edificios oficiales.
Una bandera que ya cumple más de 230 años de historia.
Fundación Legado de las Cortes 